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La apretada vecina del piso de arriba tenía fama de ser una mujer solitaria y reprimida, pero una noche, cuando se encontraron en el pasillo del edificio, él descubrió que tenía una faceta secreta que lo dejó sin aliento
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La madrastra de su amiga era una mujer voluptuosa que siempre vestía ropa ajustada y provocativa, lo que lo ponía muy nervioso.
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La apretada lencería que llevaba puesta su amiga lo volvía loco, no podía esperar para quitársela y tenerla desnuda en su cama.